PRÁCTICA UNIVERSITARIA NÚMERO 3

 

Moda basura

Iago Soler Castiñeira  

No, no vamos a hablar sobre el impacto medioambiental del negocio de la moda, al revés. Os vamos a mostrar el golpe de la moda al problema de los residuos, otra pandemia del siglo XXI.

La moda ecológica es posible, o al menos eso pensó Javier Goyeneche, presidente y fundador de la compañía Ecoalf. Hace 11 años nació una marca española que contribuye al negocio de la moda y el diseño de manera sostenible.

¿De qué manera? Empezando por usar PET reciclado. Por ejemplo, las botellas de plástico que recogen más de 200 barcos pesqueros en España. Las mismas que se amontonan en los fondos marinos, aprovechando los “ricos” bancos de plástico que conviven en el Mediterráneo, el mar más contaminado del planeta. Así se reduce el consumo de agua un 20%, el consumo energético un 50% y las emisiones de CO2 aproximadamente en un 60%. Un truco verde que posee el poliéster es que puede ser reciclado de nuevo. Otro material que usan y se puede volver a usar es el nylon reciclado. De esta manera se reduce significativamente el número de etapas en la producción, así se puede reducir el CO2 y el gasto de agua, algo clave en la industria de la moda. Sin salir de materiales de costura también se utiliza frecuentemente algodón reciclado, frenando las grandes plantaciones que aceleran la sequía, y lana digital. También se utilizan materiales poco frecuentes pero que usamos en el día a día. Neumáticos, para realizar chanclas, y posos de café, donde el polvo se reutilizará para convertirse en pellets y mezclarlo con la granza de PET o nylon. Ecoalf también se ha unido al compromiso #zeronet2030 como miembro de la comunidad Bcorp. El objetivo es llegar a cero emisiones netas de gases de efecto invernadero en 2030.

La huella de Ecoalf, no solo la ecológica, ha llamado la atención a diferentes empresas. Hace varios años vistió al Real Club Deportivo de la Coruña, también realizó los uniformes para la marca de relojería suiza Swatch, un ejemplo de su internacionalización que se resume en las cifras: un 40% de sus ventas se producen en el extranjero, principalmente en Alemania, con Berlín como epicentro del comercio germano.

                                                               Campaña publicitaria de Ecoalf


Las noticias económicas no son turbias como los fondos del Mar Menor. En los datos ofrecidos en 2017 facturó 4 millones de euros, con una inversión inicial de 2 millones de euros e invirtiendo una cuarta parte de las ganancias en I+D. En marzo de 2017 Manor Group, un fondo luxemburgués, controla el 65,9% de la matriz de la compañía, Ecoalf Recycled Fabrics. La entrada económica del pequeño reino también supuso el nombramiento de Marisa Selfa como directora general y la entrada en el gran mercado del Corte Inglés.

Actualmente posee más de 40 empleados, galardones de la Cruz Roja ( al colaborar para frenar la pobreza que conlleva el cambio climático), y ha sido la primera empresa española en ser nombrada con el certificado B Corp.

Un claro ejemplo de adaptación a los retos actuales que marcan las agendas mundiales.

Comentarios

Entradas populares de este blog

De París a Algeciras

Cuba, un viaje en el tiempo

El torpedo del Brexit